Cuando hablamos de familia, a menudo pensamos en las personas que están presentes en nuestras vidas, aquellas con las que convivimos y que forman parte de nuestro círculo cotidiano.
Sin embargo, existe una fuerza mucho más profunda e invisible que actúa dentro de cada sistema familiar: la necesidad de pertenecer.
Esta fuerza está regida por la Ley del Pertenecer, uno de los pilares de las Constelaciones Familiares, que nos muestra cómo la exclusión de un miembro de la familia puede generar consecuencias que se extienden a lo largo de las generaciones.
Pero, ¿qué significa exactamente pertenecer a una familia? ¿Y cómo la exclusión de alguien puede afectar a los descendientes que ni siquiera conocieron a esa persona?
En este artículo, exploraremos la Ley del Pertenecer, su importancia en el equilibrio sistémico familiar y cómo las constelaciones familiares pueden ayudar a sanar las heridas de la exclusión, restaurando la armonía para las generaciones futuras.
Anne Ancelin Schützenberger
Además de la contribución de Bert Hellinger con la Ley del Pertenecer, el trabajo de Anne Ancelin Schützenberger (1919-2018), especialmente en el campo de la psicogenealogía, también refuerza la importancia de reconocer a los miembros de la familia y sus historias.
En su libro «Mis Antepasados», Schützenberger explora cómo los traumas y eventos significativos pueden repetirse en fechas específicas, un fenómeno que llamó síndrome de aniversario.
Estos patrones, que a menudo pasan desapercibidos, muestran cómo las historias no resueltas de nuestros antepasados pueden influir directamente en las generaciones futuras.
Anne Ancelin, nacida a principios del siglo pasado, escribió varios libros sobre cómo estas dinámicas inconscientes afectan nuestras vidas actuales.
Es fascinante ver cómo este conocimiento profundo sobre nuestras herencias familiares está ganando visibilidad ahora, revelando la importancia de integrar y reconocer a todos los miembros de la familia, tal como nos enseña la Ley del Pertenecer.
¿Qué es la Ley del Pertenecer?
En la Constelación Familiar, Bert Hellinger, el creador de este método, identificó tres leyes fundamentales que rigen las dinámicas familiares:
- Pertenencia
- Jerarquía
- Equilibrio en los Intercambios
La Ley del Pertenecer establece que todos los miembros de una familia tienen derecho a pertenecer al sistema.
Esto significa que nadie puede ser excluido u olvidado sin que esto cause un desequilibrio en las generaciones futuras.
Esta ley es poderosa porque, muchas veces, alguien es excluido de manera inconsciente, ya sea por vergüenza, resentimiento o por la propia dinámica familiar.
Algunos ejemplos:
- Un hijo ilegítimo que nunca fue reconocido.
- Un abuelo que tuvo comportamientos considerados «inaceptables» por la familia.
- Un miembro que sufrió un trauma y terminó siendo ignorado en alguna institución de salud.
Estas exclusiones pueden ser emocionales o físicas.
Sin embargo, de acuerdo con la Ley del Pertenecer, todos tienen un lugar en el sistema familiar, independientemente de sus actos, errores u omisiones.
El Impacto de la Exclusión en el Sistema Familiar
Cuando alguien es excluido del sistema familiar, incluso de manera inconsciente, el sistema entra en desequilibrio.
¿Qué significa esto en la práctica? Imagina un rompecabezas con una pieza faltante.
Aunque las demás piezas estén perfectamente encajadas, la ausencia de una sola pieza hace que el todo quede incompleto. Así ocurre en el sistema familiar.
La exclusión de un miembro puede crear consecuencias emocionales y patrones inconscientes que se manifiestan en las generaciones futuras.
Los descendientes, muchas veces, sienten el peso de una exclusión que ni siquiera conocen.
Pueden cargar con sentimientos de tristeza, culpa, soledad o incluso repetir patrones de comportamiento sin entender por qué.
Por ejemplo, una mujer puede sentir que siempre es rechazada en sus relaciones amorosas, sin darse cuenta de que inconscientemente está repitiendo la exclusión de una abuela que fue rechazada por la familia.
Este patrón de exclusión se transmite de generación en generación, hasta que alguien lo reconoce y lo resuelve.
Es entonces cuando la Ley del Pertenecer entra en acción, exigiendo que todos, incluso los excluidos, tengan su lugar en el sistema familiar.
Casos Comunes de Exclusión Familiar
Existen muchas formas en las que puede ocurrir la exclusión dentro de una familia. Algunos ejemplos comunes incluyen:
- Hijos ilegítimos: Niños nacidos fuera del matrimonio que nunca fueron reconocidos o incluidos oficialmente en la familia.
- Gestaciones interrumpidas, espontáneas o no: Muchas familias no reconocen la existencia de un hijo que falleció antes de nacer, lo que puede generar un vacío en el sistema familiar.
- Antepasados con comportamientos problemáticos: Miembros de la familia que tuvieron comportamientos considerados inaceptables (como adicciones, delitos o traiciones) y que, por ello, fueron excluidos de la historia familiar.
- Muertes trágicas o traumáticas: Cuando alguien muere de manera violenta o trágica, el dolor puede ser tan grande que la familia «olvida» o evita hablar de esa persona, lo que también puede generar exclusión.
- Ex-parejas: En algunos casos, exmaridos, exesposas o excompañeros que tuvieron un papel importante en la vida familiar son excluidos del sistema, especialmente en situaciones de separación contenciosa.
Estos ejemplos muestran cómo la exclusión puede ocurrir de manera sutil o explícita.
Pero, independientemente de cómo ocurra, el sistema familiar queda marcado por esa ausencia, y las futuras generaciones pueden sufrir con ello, muchas veces sin comprender la verdadera causa.
La Importancia de Incluir a los Excluidos
La Ley del Pertenecer nos enseña que, para restaurar el equilibrio dentro de la familia, todos los miembros deben ser reconocidos e incluidos.
Esto no significa necesariamente que las personas deban ser traídas de vuelta físicamente al círculo familiar, sino que deben ser honradas y reconocidas, ocupando su lugar en el sistema.
Incluir a los excluidos es una manera de sanar las heridas del sistema familiar.
Cuando reconocemos a alguien que fue injustamente excluido, también estamos trayendo luz a las generaciones futuras.
Aquellos que sufrieron las consecuencias de esta exclusión finalmente pueden liberarse de patrones repetitivos y sentimientos negativos que llevan consigo, muchas veces sin saberlo.
Cómo la Constelación Familiar Puede Ayudar
La Constelación Familiar es un enfoque terapéutico que permite revelar las dinámicas ocultas dentro del sistema familiar.
Durante una sesión de constelación, los participantes, llamados «representantes», asumen el papel de los miembros de la familia de la persona que está siendo constelada.
A través de los movimientos y sentimientos que surgen en los representantes, es posible identificar exclusiones y otras dinámicas que están causando desequilibrio en el sistema.
Cuando se identifica una exclusión, el facilitador puede ayudar a la persona a reconocer e incluir al miembro excluido, trayendo equilibrio de nuevo al sistema.
Esto puede hacerse a través de frases de reconocimiento, como «Tú tienes un lugar en nuestra familia» o «Te reconozco y honro tu historia».
La inclusión es un proceso simbólico, pero muy poderoso, que libera al sistema familiar de patrones de dolor y sufrimiento.
Ejemplos de Exclusión y Sanación a Través de la Constelación Familiar
Para ilustrar el impacto de la Ley del Pertenecer, veamos dos ejemplos reales de constelaciones familiares:
- El caso de la abuela excluida: Una mujer sentía una tristeza profunda e inexplicable, además de tener dificultades constantes en sus relaciones amorosas. Durante la constelación, se descubrió que su abuela había sido excluida de la familia por haberse involucrado en una relación fuera del matrimonio. La mujer cargaba, inconscientemente, con el peso de esa exclusión, repitiendo el patrón de rechazo. Cuando la abuela fue reconocida e incluida de nuevo en el sistema familiar, la mujer sintió un gran alivio y logró comenzar a crear relaciones saludables.
- El hijo que no nació: Un hombre vivía con una constante sensación de vacío y no lograba establecer una carrera estable. Durante su constelación, salió a la luz que su madre había perdido un hijo antes de su nacimiento, y ese hijo nunca fue reconocido. Al incluir simbólicamente al hermano no nacido en el sistema familiar, el hombre experimentó un cambio profundo en su vida, logrando finalmente encontrar dirección en su carrera y sentido en su existencia.
Identificando Exclusiones en el Sistema Familiar
A veces puede no ser fácil identificar exclusiones en el sistema familiar, especialmente porque muchos miembros excluidos terminan siendo olvidados o no mencionados.
Sin embargo, existen señales que pueden indicar que alguien fue excluido, tales como:
- Sentimientos de vacío o tristeza sin explicación aparente.
- Patrones repetitivos de fracaso en determinadas áreas de la vida, como relaciones o carrera.
- Dificultad para encontrar un propósito o sentido en la vida.
- Secretos familiares que se evitan o no se discuten abiertamente.
Si identificas alguna de estas señales en tu vida o en la de tus familiares, es recomendable investigar la historia familiar y, si es posible, participar en una constelación familiar para esclarecer posibles exclusiones o dinámicas ocultas que puedan estar afectando al sistema familiar.
¡Hola! Soy Celina Cruz, desde hace 10 años trabajo con Terapias Integrativas. La aproximación Sistémica trajo un nuevo momento a mi vida, y decidí compartirla para que más personas pudieran acceder a estos grandiosos conocimientos. Escribo con mucho cariño.